La Pesca Fluvial

La pesca en los grandes ríos, como la cuenca del Río de la Plata, que incluye entre los principales a los Ríos Paraná, Uruguay, Paraguay, etc.; tiene atractivos especiales, que no son simplemente encarnar un anzuelo y tirar para ver que pasa.-

Si bien los pescadores no tienen que ser ictiólogos, es importante contar con determinados conocimientos para intentar la captura de la especie que buscamos.- Uno de los datos importantes es saber que hay peces migratorios y cual es la razón de esas migraciones: Justamente entre los peces migratorios se encuentran los que nosotros más buscamos, como ser: dorados, surubíes, bogas, patíes, armados, sábalos, manduvás, etc.- Estas especies migratorias se deben adaptar a las diferencias de correntadas, oxigenación, temperatura, acidez (PH) y muchas más; pero llega un momento en que la naturaleza le indica que deben emigrar, para cumplir con su ciclo de vida, que es nacer, reproducirse y morir.- Cuando el agua se empieza a enfriar les llega el impulso de dirigirse para el norte donde encontraran mejores temperaturas y se concentrarán los grandes cardúmenes para cumplir su ciclo de vida.- Las migraciones de estas especies para reproducirse, las efectúan aguas arriba, a las zonas de desove, estos desoves son muy abundantes, mucha cantidad de huevos.  Las hembras efectuarán estos desoves si el río esta creciendo, si el río esta en bajante los retienen a la espera del momento oportuno, esto tiene su lógica, cuando esta creciendo el agua ingresa a los arroyos, lagunas y esteros: arrastrando a los alevinos, a los lugares donde encontraran su alimento, si el río bajara el agua saldría de estos lugares y las crías quedarían en el cauce principal, donde no encontraran comida.- Muy importante, las larvas tienen flotación negativa, por lo tanto necesitan mucha corriente de agua y turbulencia para mantenerse a flote, si se hunden se mueren por la mayor presión que tiene el agua a más profundidad.- Los huevos descienden en forma muy rápida hasta llegar a las zonas con áreas de cría, se calcula que en 14/15 horas se produce el nacimiento (eclosión), luego se alimentan del saquito alimentario o bitelio y que a temperaturas ideales lo consumen totalmente en 3 o 4 días.- Cuando estas reservas se agotan, necesariamente deben entrar en las zonas de cría, que son lugares con poca profundidad, con abundante comida compuesta por larvas y pequeños crustáceos; hasta que han crecido lo suficiente, para ingresar al cauce principal, donde van a desarrollar su vida, hasta que les llega en momento de reiniciar el ciclo reproductivo.-